BODAS DE VERANO: CÓMO HUIR DEL CALOR

Es todo un reto en días en los que el termómetro amenaza con salirse de madre. Huir del calor no supone una tarea fácil, especialmente en una boda, donde los atuendos no ayudan demasiado. Sin embargo, casarse en verano es una opción muy extendida entre las parejas que quieren contraer matrimonio.  Y cómo huir del calor se convierte en una preocupación más para mantener el máximo confort de los invitados. Incluso para las bodas que se celebran en el norte de España.  Pues existen muchos lugares para casarse en Asturias que atraen cada vez a más número de parejas a nuestra región.

 

¿HUIR DEL CALOR O HUIR DE LA LLUVIA?

 

Como decíamos, el verano es la estación de las bodas por excelencia. Las razones son variadas, pero entre ellas hay dos mayoritarias. La primera, lógicamente, es asegurarse en lo posible el buen tiempo. Aunque esto del buen tiempo cada vez es un concepto más relativo. Y más en estos días en los que, en ciertas latitudes, un día nublado y fresco, se agradece mucho más que uno soleado para celebrar cualquier evento al aire libre.  Así y todo, tradicionalmente, se viene entendiendo que una boda pasada por agua desluce cualquier celebración nupcial. Y es un verdadero desastre para los fotógrafos del enlace. Por eso primamos las bodas en verano. La segunda razón es que en período vacacional es más fácil contar con invitados que trabajan o viven lejos. Y esta suele ser una razón de peso.

Como contrapartida, las bodas de verano, arrostran los riesgos de las altas temperaturas propias de la estación. Un elemento hostil con el que es preciso lidiar para que la incomodidad no se instale en el banco de invitados como uno más. Para conseguirlo he aquí algunas consideraciones ,fruto de la experiencia de un fotógrafo de bodas que acumula numerosos reportajes de boda a sus espaldas enfundado en un traje acorde con la ocasión.

 

 

CONSULTAR LAS PREVISIONES DEL TIEMPO JUSTO ANTES DE LA BODA

En verano, no es infrecuente que un día de bochorno, especialmente húmedo termine en una tarde tormentosa. Prever el calor no nos debe descuidar a la hora de estar preparados para un brusco cambio de tiempo tan propio de esta estación. Conviene estar preparados para cualquier contingencia.

 

elegir un templo amplio o restringir la entrada de invitados

En las bodas religiosas, los templos suelen asegurar unas condiciones de temperatura agradables. Especialmente en las grandes iglesias. No sucede lo mismo si la boda se celebra en un Salón de Plenos o en algunas instalaciones municipales. En estos casos el aire acondicionado puede acudir en nuestra ayuda. En las iglesias, las condiciones de penumbra y los techos elevados aseguran una buena circulación de aire y un ambiente relativamente fresco. Además los gruesos muros de piedra suelen funcionar como un buen aislante para las altas temperaturas del exterior.

 

Sin embargo, en los templos más pequeños y en algunos edificios administrativos un excesivo aforo puede aumentar la sensación de calor y de agobio. Por eso se recomienda advertir previamente a los invitados del aforo máximo y restringir el acceso a los más allegados si fuera necesario. Una persona en la puerta de acceso puede controlar esto y advertir a los invitados de los motivos. En el caso de elegir alguna ermita o pequeña iglesia, es bueno condicionar la elección a la existencia de zonas sombreadas cercanas o un buen porche o entrada cubierta al templo con la suficiente amplitud.

 

repartir abanicos o pay pays

Es un recurso muy socorrido. Colocar en los diferentes bancos o repartir a la entrada del edificio donde va a oficiarse la boda, abanicos o los más rudimentarios pay pays, ayudará a paliar los efectos del calor en los diferentes escenarios. Los pay pays pueden imprimirse con motivos alusivos al enlace y los abanicos más elaborados, pueden repartirse como detalle de boda, sin esperar al banquete. Son elementos prácticos y además actúan como distracción para engañar y disipar la sensación de calor.

disponer de carpas sólidas y lugares de refugio apropiados

Las bodas al aire libre en verano son lo más habitual. Y una de las razones que deciden a muchas parejas a casarse en verano, como indicábamos antes. Disfrutar de un cocktail o banquete en unos suntuosos jardines o en un entorno natural siempre es un plus a la hora de celebrar una boda. Sin embargo, disponer de carpas sólidas, o haimas que sirvan de refugio ante el sol excesivo como ante un eventual chaparrón es indispensable. Si se celebra la boda junto algún tipo de edificio, es muy recomendable tener previstos espacios a la sombra o al resguardo de laa posible lluvia, donde los invitados puedan refugiarse de estas inclemencias con espacio suficiente para seguir disfrutando del evento.

 

 

LAS VENTAJS DE CASARSE EN Asturias

Como fotógrafo de bodas en Asturias, puedo testimoniar que casarse aquí está cada vez más de moda. Son muchas las parejas que aún residiendo en otros lugares, eligen Asturias para casarse, aprovechando el más mínimino vínculo o excusa que les vincule con nuestra región. Podemos pensar que el clima es una de ellas y, sin duda, acertaremos. Aunque tampoco podemos descartar otros motivos como los impresionantes paisajes, la gastronomía e incluso las gentes.  En una entrada anterior, hablábamos de los atractivos de casarse en Covadonga. Pero la verdad es que existen multitud de localizaciones que hacen las delicias de cualquier pareja que busca lo mejor para el día de su boda. Por no hablar de las posibilidades fotográficas. Una razón más para aquellos que eligen casarse en Asturias como opción.

 

Ya seáis oriundos de la tierrina o sea cual sea vuestra excusa, no puede haber lugar mejor para celebrar una boda. O, al menos, que ofrezca una tregua a las altas temperaturas.  Si solo os falta eso podéis contactar por mail en info@juanllavio.com o enviar un ws al teléfono 619 39 19 97.