3 MOMENTOS ICÓNICOS DE UNA BODA EN IMÁGENES

 

En todo trabajo fotográfico hay una doble aportación al resultado. Por un lado están los protagonistas de la acción o el posado y por otro el fotógrafo que sostiene la cámara y dispara.  Y ninguna se debe minimizar. La conjunción de ambas es lo que permite captar imágenes dignas de un álbum. Incluso en la fotografía de paisajes o en las sesiones de estudio.  El uso del trípode o del disparo automático y la iluminación artificial no desmerecen esta colaboración. El fotógrafo y lo fotografiado convergen siempre en un punto del espacio y del tiempo que no volverá a repetirse. Por eso, cada fotografía es única siempre. Como fotógrafo de bodas en Gijón puedo asegurar que cada boda contiene momentos especiales e irrepetibles mucho más allá del tópico. Aquí van algunos ejemplos como botón de muestra. En esta ocasión nos centramos en 3 momentos icónicos de una boda que, aunque repetidos en cada enlace, nunca son iguales.

 

 

con este anillo yo te desposo

 

En todo ritual hay un clímax. Un momento culminante de todo el proceso en el que cobra sentido y se condensa el significado de lo que se está celebrando. En el caso de una boda, ese momento se manifiesta en la expresión del consentimiento de los cónyuges en contraer matrimonio. Una palabra y un gesto; puesto que al “si quiero” acompaña el preceptivo intercambio de alianzas, siendo este último mucho más visual y propenso a ser fotografiado. Así y todo, la colocación del profesional resulta primordial para obtener el resultado deseado. Para ello, habrá de planificarse primero. Será muy conveniente tomar con antelación las medidas necesarias en cuanto al aprovechamiento de la iluminación y del espacio disponible para no estorbar ni interferir en el acto simbólico central de la boda.

Fotógrafo de bodas en Gijón. Bodas irrepetibles

 

 

fotos del baile nupcial

 

Estamos ante el momento romántico por antonomasia de cualquier boda. En el baile nupcial los novios se dejan ver ya en su primer acto oficial como marido y mujer y – lo que es más expresivo – como pareja, en este caso, de baile. Ya no son dos sino uno los que se ofrecen a los ojos de los asistentes unidos en una danza que puede ser tanto delicada como informal. Pero eso da igual. Lo importante es que están casados y contentos de estarlo y así lo manifiestan ante los demás.

 

Fotografiar a la pareja de novios bailando al estrenar su condición de recién casados es más difícil de lo que parece. Para capturar buenas instantáneas los profesionales más concienzudos asisten incluso a los ensayos previos. Buscando, sobre todo la fotografía de ese pase de baile original o distintivo. Otros fotógrafos simplemente recurrirán a su instinto y experiencia para aniticipar esos momentos y apretar el disparador en el momento oportuno.

 

En los tres momentos icónicos de una boda que acabamos de analizar, se hace patente lo que comentábamos al principio. El fotógrafo es importante, pero sin el concurso de quienes aparecen al otro lado del objetivo, estas fotos serían muy diferentes. Saber aprovechar el momento es condición indispensable de todo buen fotógrafo de bodas, pero ser uno mismo es algo insustituible e impagable.

 

Si buscas un fotógrafo de bodas en Gijón con experiencia en reportajes de boda y sesiones nupciales este puede ser tu sitio. Escribe un correo a info@juanllavio.com o contacta por Whatsapp al  619 39 19 97 y estaré encantado de atenderte.