FOTOS DE MOMENTOS ROMÁNTICOS
Dicen que un día alguien le reprochó a Ulises que la narración de sus viajes – su propia y original Odisea – estaba plagada de demasiados naufragios. Y él contestó: Si tú estás cansado de oír hablar de naufragios, imagínate yo de padecerlos. Lo que viene a significar que vivir las cosas en primera persona nunca es igual que oírlas contar a otros. Por eso, si le preguntas a cualquier fotógrafo de bodas en Asturias cuáles son los momentos románticos de una boda por antonomasia, probablemente te sorprenda. Y no porque esté cansado de asistir a ellas, ya que todos sabemos que no hay dos bodas diferentes.
¿CUÁL ES EL MOMENTO MÁS ROMÁNTICO DE UNA BODA?
Y es que las fotos románticas de una boda abarcan muchos escenarios y momentos. Mucho más allá del cenital instante del “sí quiero” articulado por los novios con voz trémula por la emoción. O del baile nupcial de la pareja en medio de todos los focos. El romanticismo acecha en cada esquina, en cada rincón donde se celebra una boda y exista alguien dispuesto a retratarlo. Ya sea el fotógrafo oficial del casamiento o cualquier otro aficionado, con o sin móvil. Y no estamos hablando de la estética del evento, pues el romanticismo puede faltar en una boda romántica de estética decadente o vintage y derramarse a raudales en una boda de temática country, por poner un ejemplo.
FOTOGRAFIANDO SENTIMIENTOS
Las mejores fotos de momentos románticos de una boda, desde luego, son las instantáneas. Fotos robadas al hieratismo impuesto a los novios en las poses y escenarios prefabricados. Hurtadas a la expectativa fácil y a los nervios que atenazan cualquier rasgo de espontaneidad. Fotos, en definitiva, auténticas. Que reflejan sensaciones reales y no impostadas de cara al álbum nupcial. Generalmente las emociones más profundas relacionadas con todo eso que – sin consenso aparente – se denomina amor, afloran de la manera más insospechada. A través de gestos de los novios, por ejemplo. Y sobre todo de las miradas. Aunque también las manos pueden jugar su papel. O los abrazos sentidos como una verdadera fusión de dos destinos.
LA ELOCUENCIA DE LO DISCRETO
A veces un leve gesto, un roce, o una expresión fugaz en la cara de uno de los novios, son mucho más elocuentes que el beso obligatorio impuesto por un coro vehemente de invitados achispados. Ahí asoma lo romántico, lo verdadero. Lo que hay detrás de todo el oropel que rodea a cualquier evento nupcial. Y lo único que importa.
Si buscas tu fotógrafo para bodas en Asturias y aún te preguntas cuál escoger, tu respuesta puede estar en el 619 39 19 97 o a vuelta de correo enviando un e-mail a info@juanllavio.com.
Deja una respuesta