recuerdos de boda y bodas para recordar
La entrega de detalles de boda a los invitados forma parte de la parafernalia nupcial desde hace mucho tiempo. Quizás inmemorial. Puede parecer algo banal a algunos, pero no deja de ser una costumbre con su significado. Al igual que ocurre en las comuniones o en otro tipo de celebraciones como los bautizos, los pequeños regalos que se hacen a los asistentes son más que un fetiche. O una fruslería. Son la expresión modesta de un agradecimiento sincero, la mayoría de las veces. Algo que intenta decirnos: gracias por estar aquí y convertir este momento tan importante para nosotros en algo importante también para vosotros.
EN EL NOMBRE DE LOS NOVIOS
A esta manifestación de gratitud, a veces se une un texto o un recordatorio, como en las comuniones, con los nombres de los novios. Lejos de resultar pretencioso, es más bien la proclamación de un propósito. El de que esos nombres, desde ese momento cobren sentido, unidos. Y así los recuerden quienes conserven el pequeño presente que se les hace. Es cierto que muchos detalles de boda no sobreviven a la prueba del tiempo en manos de sus nuevos poseedores. Algunos – generalmente pocos – merecen el olvido o el abandono arrumbados en algún oscuro cajón, cuando no directamente una segunda oportunidad en virtud del reciclaje (dependiendo del material).
DETALLES DE BODA PARA TODOS LOS GUSTOS
Otros, son sencillamente enternecedores, y son conservados por la familia o los amigos más íntimos como testimonio de esa boda. Y también los hay que son aprecidados por su utilidad o servicio futuro, desde una petaca a un abrecorchos. Como fotógrafo de bodas en Gijón puedo decir que he visto casi de todo en iconografía nupcial y detalles de boda. Y he de deicr que el buen gusto predomina, aunado, cuando es posible, con la funcionalidad. Se trata de regalar algo que los invitados a la boda no se vean obligados a tirar a las primeras de cambio o a olvidarse voluntariamente en la habitación del hotel.
Sin embargo, hay detalles de boda meramente ornamentales que poseen un encanto especial. Después de fotografiar tantas bodas, conservo algunos, pero es inevitable renunciar a la mayoría de ellos si uno quiere tener espacio en casa. Y recuerdo muchos. Detalles de boda originales, ecológicos, adminículos para llevar los anillos, cajitas para todos los gustos, petacas o cortaplumas grabados…Sería imposible destacar alguno sobre los demás
LOS MEJORES RECUERDOS DE BODA
No obstante, esa otra función de los detalles de boda de la que hablábamos, la de servir de recordatorio, quizá sea la más prescindible. Porque el mejor recuerdo de una boda, tanto para los asistentes como para los contrayentes siempre quedará en su cabeza. Es cierto que unas buenas fotografías de boda o un buen álbum nupcial son un recurso inmejorable a la hora de reocrdar ese día. Pero son solo imágenes, fotos de los novios, o de los invitados, o de la celebración en la Iglesia, en el Ayuntamiento, o donde sea. Como lo son las fotos de la sesión postboda. Son totalmente instrumentales.
UNA EMOCIÓN VALE MÁS QUE MIL IMÁGENES
Aunque todo esto suene contradictorio en boca de un fotógrafo de bodas o alguien que se dedica a la reproducción gráfica de los eventos nupciales, si lo queréis de otro modo. Lo que quiero decir, es que lo que evocan las fotos de boda tiene que estar previamente atesorado en nuestra cabeza, en forma de recuerdo. Y de emoción. Un recuerdo más o menos latente que unas buenas fotografías puedan despertar y avivar. Pero si en su momento no vivimos la emoción de ese día, no vibramos con la felicidad contagiosa de los novios, o no sentimos el cosquilleo de la empatía, será difícil que unos píxeles o unos pedazos de plástico impresos nos digan algo. Por muy bueno que sea el fotógrafo del evento.
Si así y todo buscas un fotógafo de bodas en Gijón o en cualquier parte de Asturias y sus inmediaciones, puedes conactar llamando al 619 39 19 97 o enviando un correo a info@juanllavio.com.1
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