Una de las cosas más importantes en el look de una novia, es el ramo. Flores silvestres, rosas, lirios… las flores llenan de color y alegría ese día tan importante en la boda de todas las parejas.

Sin embargo, es una de esas tareas que las novias suelen dejar para el final, bien por falta de tiempo o por no considerarlo tan importante. Es fundamental elegir un ramo acorde a tu estilo y por supuesto, a tu vestido de novia.

¿Cómo elegir ramo de novia?

Si te consideras una auténtica novata en el tema de flores, ¡que no cunda el pánico!

Forma y tamaño

Lo primero hacer una elección de la forma y el tamaño. ¿Te gustan redondeados, grandes, pequeños…? Diferenciamos los siguientes:

Cascada: Su composición es vertical. Las flores caen hacia abajo.
Silvestre: Perfecto para bodas rusticas. Suele realizarse con aire desenfadado y flores de temporada.
Bouquet: Forma redondeada y flores pequeñas. Genial para vestidos de cuerpo sencillo.
Asimétrico: Bouquet formado por diferentes flores aparentemente desordenadas.

COLORES

Elige los colores de tu ramo una vez hayas definido tu paleta de colores para la boda. Con esto nos referimos al color de tu vestido, complementos, vestidos de las damas de honor…

ESTILO

Si eres una novia muy romántica, el mejor estilo es un ramo en cascada con flores silvestres en color nude. Para novias más tradicionales, los ramos redondeados tipo bouquet son los más vistos. Con colores suaves como el melocotón.

Las novias más modernas optan por ramos asimétricos que combinan flores de tallo corto con tallo largo.

¿EN QUÉ ESTACIÓN ES LA BODA?

Como fotógrafo para bodas en Gijón, he realizado bodas de todo tipo y en distintas estaciones. ¡No todo el mundo prefiere el verano! Si decides realizar la boda en otoño recomendamos elegir las dalias o brezo. Para primavera y verano, las rosas, claveles, margaritas… ¡son perfectas! En época más fría, como el invierno, los tulipanes, calas, ranúnculos… no te decepcionarán.